Durante el verano, el técnico de mantenimiento del DES, Andrew "Tige" Rajic, notó que el agua de la fuente se filtraba a través de las juntas de mortero de su cuenca de hormigón. En respuesta, el DES cerró la fuente el 16 de septiembre.

Los trabajadores retiraron y reemplazaron el mortero viejo y luego aplicaron un acabado repelente al agua. La fuente volvió a fluir el 25 de septiembre.

La fuente Tivoli, la primera de las tres fuentes de agua instaladas en el campus del Capitolio, comenzó a funcionar el 15 de abril de 1953. Fue diseñada para parecerse a la pieza central de un parque de Copenhague , que se había inspirado, a su vez, en una fuente que adornaba un jardín renacentista italiano. En 2017, DES actualizó las tuberías y los sistemas mecánicos de la fuente , lo que redujo su uso de agua en un 32%.

Transcripción del vídeo:

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Jeff MacDonald, planificador de recursos históricos y culturales, Departamento de Servicios Empresariales de Washington. Bueno, la fuente Tivoli fue concebida a fines de los años 40 y fue un obsequio de la Fundación Olympia-Tumwater al estado de Washington.

Hoy, más de 70 años después, es algo que todavía podemos disfrutar, y estas cosas no se cuidan solas. Por eso, ahora estamos buscando oportunidades para aprender sobre cómo estas características históricas envejecen con el tiempo y qué podemos hacer para preservarlas mejor para las generaciones futuras.

Mi nombre es Andrew Rajic Jr. Me llaman Tige. Trabajo en DES. Soy mecánico de mantenimiento 3. También soy parte de HVAC, pero soy el encargado de la fuente. También me encargo de todas las torres de refrigeración del campus. Mi predecesor se jubiló y todavía pienso que es su fuente. Por eso, siempre me gusta mantenerla en buen estado. Además, tenemos visitas guiadas cada hora en punto. Conozco a mucha gente interesante de todas partes.

Una semana típica, diría que a principios de semana, llego y me aseguro de que todas las fuentes estén funcionando. Los niveles de agua son buenos. Los productos químicos... Hago pruebas químicas. También hay dos filtros de arena que ayudan a mantener los residuos y otras cosas fuera de aquí y tengo que limpiarlos una o dos veces por semana, según el clima. Así que me aseguro de que esté presentable para cuando la gente venga a disfrutar de la vista.

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